Nada grande se puede hacer con la tristeza...

El maestro Arturo Jauretche expresaba hace algunos años: “Nos quieren tristes porque los pueblos deprimidos no vencen. Por eso venimos a combatir por el país alegremente. Nada grande se puede hacer con la tristeza”.

Cuando uno esta triste y desanimado, habitualmente, no puede generar nada bueno.

Encerrarse a mirar la CRISIS actual por la tele luego comentarla con sus vecinos, quienes también están en esa misma sintonía, generará irremediablemente una carga de energía emocional negativa, que lo impactará profundamente y lo sacará de su eje de equilibrio.

Y si desde ese lugar luego intenta planificar como surfear la crisis, estaremos sin mas remedio ante la crónica de una muerte anunciada.

El estado anímico influye, y mucho, en la calidad de respuesta que le encontramos a cada CRISIS / CONFLICTO que se nos presenta.

Es por eso que juntarse y compartir charlas de "camaradería" con pares, que al igual que nosotros, trabajan como mínimo 10 horas diarias para ganarse el mango, que estamos de buen humor aunque el tiempo sea “fulero”, nos distingue del resto. Porque sabemos que la alegría es sanadora y reparadora en tiempo de crisis.

Por último, parafraceando a Don Arturo podríamos decir que: “Nosotros no somos vivos, apenas somos giles avivados”