PERGAMINO - LUNES 4 DE MAYO DE 2009
Promueven un sistema de ayuda financiera a sectores que no tienen posibilidades económicas pero cuentan con proyectos y posibilidades de desarrollo.
Lisandro Mogliati y Marcelo Di Césare impulsan las actividades del Curso de Gerenciamiento de Microempresas que organiza en Pergamino la FECAMI (Federación de Cámaras de Microempresas de Buenos Aires) y el Ministerio de Trabajo de la Nación y que están vinculados a la Cámara de Microempresarios de Pergamino que preside Leonardo Lovera, secundado entre otros, por Pablo Antonetti y Karen Censi, presentaron una propuesta de ordenanza en el Concejo Deliberante donde se promueve la creación de una Banca Social para atender a los emprendedores que están fuera de toda opción de financiamiento bancario.
¿Cómo surge la idea?
(Mogliati). Desde hace casi un año venimos promoviendo la formación empresarial, y la unidad de los pequeños y medianos empresarios de la ciudad, con el objetivo de cooperar en los procesos de desarrollo económico, y encontramos en la microempresa, como figura, un campo fértil donde poder ayudar en su capacitación, su crecimiento y desarrollo, y más que nada para que este sector tan dinámico de la economía, tenga voz en la comunidad y se transforme en un actor local de relevancia y comience a haber políticas destinadas a promover a los pequeños empresarios, que son la semilla de la mediana y gran empresa, si hay decisión empresarial de ir hacia delante. Si hay formación técnica y si existe decisión política de promover herramientas que apuntalen lo anterior, todo es mucho más fácil. De estas ideas nace nuestra iniciativa de crear una Banca Social que apoye financieramente a los emprendedores más pequeños, que hoy se ven imposibilitados de crecer o bien volcarse a un emprendimiento por la falta de acceso a recursos o por no ser sujeto de crédito bancario.
¿Cuál es el aporte que puede hacer este proyecto en caso de prosperar?
(Di Cesare). Nosotros pensamos que la política social debe basarse en la creación y el sostenimiento del empleo, y esto es básicamente lo que estamos proponiendo; si bien no resuelve la problemática del desempleo y la exclusión social, un desocupado o subocupado que puede acceder a conformar su pequeña empresa, darle sustentabili-dad en el tiempo e ir creciendo paulatinamente, dejaría de ser demandante de planes sociales, que si bien muchas veces son un salvavidas en tiempos de profundas crisis, sostenido en el tiempo, denigran la condición humana, porque como dice una célebre frase "el trabajo dignifica". Además, un pequeño emprendedor en su camino a transformarse en empresario, va regularizando su situación legal, impositiva, contable y va creando en forma directa o indirecta puestos de trabajo, blanqueando a sus empleados y esa debe ser la lógica del desarrollo económico, crear un ámbito donde prevalezca el empleo y no el asistencialismo. Por eso la Banca Social promueve que los emprendedores con ideas viables, que lleven adelante un proyecto de producción de bienes o servicios a nivel local, sean apoyados, integrados bajo la forma de pequeños grupos de emprendedores individuales que hagan diferentes cosas (por ejemplo, uno de ellos puede fabricar escobas, otro puede coser pantalones, otro montar un taller mecánico, por citar algunos casos); pero todos son solidarios entre sí, en lo que respecta a la devolución de los créditos que tomen de la Banca Social y en la medida de lo posible la Banca Social prestará con las herramientas de trabajo y algo de dinero necesarios para comenzar la actividad, luego de hacer un buen análisis de la viabilidad de cada empren-dimiento.
Prueba piloto
"Al margen de nuestra propuesta legislativa local, nosotros mismos como Cámara vamos a acompañar e impulsar una prueba piloto, ayudando a implementar el banquito popular de la buena fe en Pergamino, y en colaboración con una ONG amiga de la ciudad de Rojas contaremos con un fondo importante para comenzar a dar microcréditos, a pequeños emprendimientos de la periferia local junto a un centro misionero que trabaja en los barrios Villa San José y Otero, una gestión que llega gracias a otro joven que está muy comprometido con el área de la microempresa, Leonardo Mazzucchelli, que es asesor de la Secretaría de Producción de Rojas" explicaron ambos referentes.
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